Soy Darín

Siempre quise ser como Darín. Y el otro día me acordé de esa publicidad donde él manejaba un Toyota Corolla y se le acercaba un chica muy bonita y le preguntaba si él era el dueño. Le pedía manejar el auto, él accedía y la chica se lo re pisteaba. Lo ponía a full, entraba en el autódromo, nótese que lo manejaba de manera arriesgada ahí, no en la calle. Muy bien los de la empresa de publicidad, la responsabilidad social. La cuestión es que después de que terminaba todo, la chica le decía algo así como “muy lindo tu Corolla” y lo dejaba garpando. Bueno, yo siempre quise ser como Darín y no sé si será un acto fallido que la vez pasada me compré un Toyota Corolla usado, un 2011. La verdad que el auto está buenísimo, lo único, creo que me convendría haber juntado un poquito más y llegar a un cero, que no era tanta la diferencia. Pero la verdad que estaba ansioso y fui y me compré uno que vi en una concesionaria de la calle Córdoba que estaba en re buen estado. Y heme aquí, soy como Ricardo Darín. Y el auto, bueno, qué se puede decir, es un auto japonés que tiene todos los lujos, está impecable, se ve que el dueño anterior lo cuidaba. Airbag, cierre centralizado y éste tiene bluethoot para conectar el celular por ejemplo. Si querés también le podés poner un usb. En las curvas se agarra muy bien. Tiene un apoyabrazos donde va la palanca que resulta muy cómodo. Las luces de abajo para salir a la ruta también son un buen detalle. Levantavidrios eléctricos, igual que el control de los espejos y estéticamente es hermoso. Estoy enamorado del auto. El que me compré yo viene con palanca manual, no es automática. Es un auto espectacular, el año que viene si puedo lo cambio para no desactualizarme, pero me compro otro Corolla.